LIMPIEZA INTERDENTAL

Mantener los espacios interdentales limpios es imprescindible para conservar encías y dientes sanos

Cuidar las encías

Unos dientes sanos son fundamentales para disfrutar de una infancias saludable. Los dientes sirven a los niños para masticar, para pronunciar con claridad y para exhibir una resplandeciente sonrisa. Los padres desempeñan un papel fundamental en la salud dental de sus hijos.

Es especialmente importante despertar en el niño entusiasmo y motivación por el cuidado de los dientes. Recordad que está en vuestra mano ser un buen ejemplo para vuestro hijo, tanto cuando le enseñáis a cepillarse los dientes correctamente como cuando le lleváis a una revisión al odontopediatra. ¡Y no olvidéis elogiarle por su acción después de cepillarse los dientes y alabar su radiante sonrisa!

La limpieza interdental

Existen muchas formas de limpiarse entre los dientes, por ejemplo con hilo dental. ¿Sabías que si no utilizas el hilo dental estás dejando sin tocar y sin limpiar hasta un 40% de la superficie de los dientes?

La limpieza interdental te ofrece varios beneficios indudables desde el primer día. Tras la limpieza interdental, tus dientes y encías estarán más limpios porque el hilo dental permite acceder a zonas donde el cepillo de dientes no alcanza.

Tendrás un aliento más fresco y la salud de tus encías mejorará.

Si no estás acostumbrado, al principio puede parecer algo difícil, pero en realidad sólo exige un poco de práctica. Muy pronto notarás la diferencia y se habrá integrado en tu rutina diaria…como el propio cepillado de dientes.

Es posible que las primeras veces las encías te sangren un poco. Es normal. Podría ser indicio de que tienes alguna forma de enfermedad gingival. No dejes de realizar la limpieza interdental cada día. A medida que tus encías estén cada vez más sanas, dejarán de sangrar. Si la hemorragia persiste, consulta a tu dentista.

Cómo utilizar el hilo dental

Este esquema te muestra cómo utilizar este importante aliado para mantener nuestros dientes y encías sanos.

No importa si nunca te has limpiado entre los dientes: nunca es tarde para empezar. Independientemente de la edad que tengas, la limpieza interdental aportará a tus dientes y encías beneficios importantes que notarás rápidamente. Así que, cuanto antes empieces, tanto mejor.

La limpieza interdental, al alcanzar zonas a las que no llega el cepillo, te proporciona una sensación de limpieza en dientes y encías. Además, conserva tu aliento fresco y, lo que es más importante, permite detener de inmediato la enfermedad gingiva.

Otros medios

Además del hilo dental existen otros productos diseñados para limpiar entre los dientes. Pide a tu dentista que te indique cuáles son los más adecuados para ti.

Limpieza interdental a pilas
Este aparato que incorpora dos accesorios, flossette y púas, convierte la limpieza interdental en un proceso agradable y conveniente mediante suave vibración. Colibrí alcanza entre los dientes arrastrando restos de comida y placa de modo fácil y cómodo.

Eficaz, los accesorios funcionan como la seda dental: flossette aparato de seda dental con diseño ergonómico para llegar a las zonas de mas difícil acceso y púas interdentales para limpiar fácilmente entre los dientes con un suave sabor a menta.

Cambia de cepillo cada tres meses, o antes si ves que los filamentos empiezan a parecer desgastados. No dejes que los niños compartan sus cepillos: cada uno debe tener el suyo.

La caída de los dientes

El cepillado de dientes y la limpieza interdental diarios, así como las visitas regulares al dentista, aumentarán la probabilidad de mantener unos dientes y encías sanos a lo largo de toda la vida. Evitando la enfermedad gingival prolongaremos la vida de nuestros dientes y mejoraremos sustancialmente nuestra calidad de vida.

Un trabajo completo

Mantener limpios los espacios interdentales no es sino terminar lo que has empezado con el cepillado. Además, cuando realices una adecuada limpieza dental en casa, descubrirás que las visitas al dentista son cada vez más agradables y relajantes. Por tanto, sigue cepillándote de forma adecuada y ¡no descuides la limpieza interdental!

En resumen

• Cepíllate los dientes dos veces al día durante dos minutos como mínimo.

• Haz una limpieza interdental diaria antes de cepillarte los dientes: por la mañana o por la noche, como prefieras.

• El sangrado de las encías puede ser indicio de enfermedad gingival y debería cesar a los pocos días de empezar con la limpieza interdental. Si la hemorragia persiste, consulta al dentista.

• Sigue un plan de limpieza interdental, pidiendo al dentista que te indique las zonas de tu boca a las que has de prestar una atención especial.